Opinion

Sobre la reciente feria de emprendimiento de Valledupar

Por/ Andrea Guerra Peña

Durante el pasado fin de semana, en las calles del antiguo Valle del Cacique Upar, se llevó a cabo la Feria de Emprendimiento, Cultura y Turismo, iniciativa liderada por la alcaldía de la capital del Cesar, que tenía como objetivo principal reactivar la economía de la ciudad e impulsar a cientos de emprendedores locales que participaron en la exposición de sus pequeños y medianos negocios dentro de las emblemáticas calles del renovado centro histórico.

El término ‘reactivar’ se ha vuelto muy popular en las economías mundiales durante el último año debido a la crisis generada por la pandemia de Covid19, por lo cual, en el caso de la ciudad administrada por José ‘El Mello’ Castro, se hace necesario el impulso para volver a activar el desarrollo sostenible de las actividades comerciales de la región, principalmente porque la capital mundial del vallenato, está ubicada en los primeros lugares con mayor desempleo en el país. Lo que es aún peor, es que son jóvenes y mujeres las poblaciones más afectadas.

Ahora bien, habría que preguntarse si éstos eventos ocasionales lograrán reducir la cifras de 18,5% de desempleo que hasta el mes de agosto del presente año registró el Departamento Administrativo Nacional de Estadística, o si se logrará impactar a largo plazo, para evitar que sigan multiplicándose las cientos de empresas que han cerrado sus puertas en el último año a causa de la crisis, según ha manifestado la Cámara de Comercio de Valledupar. La misma coyuntura de salud pública que atrasó todos estos avances, fue la que generó que además de todas las expresiones artísticas que rodearon la feria, también hubiera servicio de vacunación contra el Covid19, sin embargo, entre los estrechos callejones inundados de gentes, no se guardaba la distancia mínima de dos metros ni el uso obligatorio del tapaboca.

Entre tanto, la administración local estuvo dedicada a publicitar cómo un recurso tan sencillo de decoración, como son las inusuales sombrillas de colores, generaron alto impacto en la ciudadanía vallenata, la misma a la que le urgen mejores estrategias políticas para subsanar las principales deficiencias económicas, entre ellas la pobreza y el desempleo, para que por supuesto, se fortalezca la ruta de la reactivación desde una articulación multidisciplinar que permita lograr resultados duraderos en la economía de la ciudad y sus alrededores, que no sea sólo una cuestión de un efímero fin de semana.

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