Corte Constitucional aprobó el matrimonio entre homosexuales
En una decisión histórica, La Corte Constitucional le dio vía libre la unión entre parejas de homosexuales.
Tras meses de debate y discusión, la Corte Constitucional votó este miércoles a favor del matrimonio entre parejas del mismo sexo.
La Sala Plena de la Corte Constitucional estudió cuatro tutelas de varios activistas de la comunidad LGBTI, y parejas homosexuales, que buscan que las uniones entre parejas del mismo sexo no sean catalogadas como una unión solemne, sino como un matrimonio civil, con los mismos derechos y deberes que los de las parejas heterosexuales.
La ponencia, que rechaza esa solicitud y que argumenta que ese vínculo no se puede llamar matrimonio, la tuvo el magistrado Jorge Pretelt, pero, al ser estudiada por sus colegas en la Sala Plena, fue derrotada por la mayoría.
Pretelt sostenía que la legislación decreta que el matrimonio solo aplica para la unión entre hombres y mujeres y, según su ponencia, cambiar esa denominación le correspondería al Congreso y no al alto tribunal constitucional.
Fuentes cercanas al proceso le indicaron a EL TIEMPO que la votación fue de seis votos en contra de la ponencia y tres a favor. Derrotar la ponencia de Pretelt, significa que el alto tribunal apoya la petición de quienes interpusieron las tutelas, y le da el sí al matrimonio entre parejas del mismo sexo.
Los magistrados que votaron a favor de denominar las uniones gay como matrimonios fueron María Victoria Calle, Luis Ernesto Vargas, Alberto Rojas Ríos, Gloria Ortiz, Alejandro Linares y Jorge Iván Palacio.
El estudio de la demanda pasará a otro magistrado que debe redactar una ponencia de acuerdo a lo que decida la mayoría, es decir, a favor del matrimonio gay.
Por orden alfabético, el nuevo estudio de la demanda de la comunidad gay le correspondería al magistrado Alberto Rojas, quien en votaciones anteriores se ha mostrado favorable a los derechos de las parejas del mismo sexo como la adopción, y de las minorías.
Así ha sido el camino para el matrimonio igualitario
En una sentencia del 2011 la Sala Plena de la Corte exhortó al Congreso para que regulara las uniones gays y le dio un plazo de dos años al legislativo para hacerlo. En ese fallo señaló que, si en ese periodo el legislativo no regulaba el tema, las parejas homosexuales podían acudir ante un notario o juez para formalizar su vínculo con un contrato de unión solemne.
Pero la Corte recibió varias demandas de representantes de esa comunidad que pedían que el vínculo se llame matrimonio, afirmando que darle un nombre distinto es discriminatorio.
Según Luis Felipe Rodríguez Rodas, el primer activista que presentó una tutela pidiendo que esta unión se llame matrimonio, lo que se pretende es que a los gays se les reconozca el matrimonio civil.