El embajador de Colombia en Washington (Estados Unidos), Francisco Santos, declaró que en la coyuntura de la crisis en Venezuela, el tema del eventual envío de tropas a Colombia, aunque puede ser “pura especulación”, una persona con tanta trayectoria como John Bolton (consejero de seguridad de Trump) “no deja ver eso inocentemente”.

“Creo que es una jugada diplomática muy inteligente para decirle a Venezuela que esto es el final (…) es un paso adelante”, expresó, dice una información de Colprensa, por declaraciones entregadas por Santos a la cadena radial RCN

Con lo anterior, Santos cree que se está viendo por primera vez “la luz al final del túnel” en la situación venezolana, y que los cambios de gobierno en ese país y en Colombia han sido claves; calificó las decisiones de los países miembros del Grupo de Lima como “muy duras” y resaltó el apoyo de las mismas por parte de Estados Unidos, Canadá y Europa.

“Creo que se habla de madurez diplomática y política. Hay que reconocer el liderazgo del presidente Duque en este camino que ya está produciendo una apertura y posible salida”, agregó.

¿Fue calculado el mensaje de Bolton?
En este punto, Francisco Santos dijo que no le cabe “la menor duda” de la intención del mensaje en la libreta del funcionario estadounidense. “Cuando uno ve el recorrido de John Bolton se ve que es un hombre de una trayectoria… ‘es un perro viejo que late echao’, es una persona que sabe dar cada mensaje (…) lo más interesante de todo es que fueron los países del Grupo de Lima los que dieron el paso al frente (…) hay un mismo objetivo y consenso que es el regreso de la democracia y la estabilización económica a Venezuela”.

Finalmente, al calificar la situación como una “película”, reiteró el mensaje que se ha dado en todo el globo; que “Estados Unidos siempre ha dicho que todas las opciones están sobre la mesa”.

“Lo más importante es que es un mensaje en el que se empieza a apretar poco poco -a Maduro. Le dicen- que salga de manera digna o acabe como -Manuel Antonio- Noriega, que vayan por usted allá”, concluyó.

Nota de contexto: Manuel Antonio Noriega Moreno, dictador militar entre 1983 y 1989, fue apartado del poder en Panamá por tropas del gobierno de los Estados Unidos. Luego pasó 17 años en una cárcel federal de Miami tras ser condenado por los delitos de tráfico de drogas, lavado de dinero y nexos con el crimen organizado.