Las jugadas políticas de Duque para recobrar respaldo político y gobernabilidad
El presidente Iván Duque hizo dos nombramientos con los que busca mejorar la interlocución política en dos de sus principales carteras. Fortalece el perfil político, pero no amplía participación a partidos.
Gobierno colombiano rechaza señalamientos de Maduro contra UribeInicialmente decidió mover a su canciller Carlos Holmes Trujillo para el Ministerio de Defensa y designó como nueva jefa de las Relaciones Exteriores a la exsenadora Claudia Blum.
Es un hecho que los dos saben del manejo político, pues fueron congresistas, pero también están curtidos en lo que tiene que ver con la diplomacia. Juntos tienen respetabilidad dentro de los partidos políticos.
En la Casa de Nariño consideran que estos dos movimientos buscan traer una mirada remozada en las dos carteras.
Blum llega al cargo luego de haber participado en actividades académicas en Estados Unidos, país en el que también fue embajadora ante Naciones Unidas entre 2006 y 2010, es decir, tiene un contexto de lo que está ocurriendo a nivel internacional.
Y Trujillo llega a la cartera de Defensa con sus habilidades para relacionarse con los sectores políticos, luego de convertirse en una de las figuras del uribismo.
Pero los dos nombramientos de Duque también evidenciaron que el jefe de Estado hizo una recomposición de su gabinete sin contar con los partidos políticos que le están pidiendo que haya participación. Y que incluso promovieron la moción de censura que le costó el puesto al ministro Guillermo Botero.
Trujillo viene del mismo gabinete y hace parte del Centro Democrático, partido del que incluso fue precandidato presidencial.
Mientras tanto, Blum se retiró del Congreso en 2006 para irse como embajadora ante Naciones Unidas.
El senador uribista José Obdulio Gaviria dijo que esto hay que verlo “en la perspectiva de la moción de censura”, que infortunadamente cortó la cabeza del ministro de Defensa. “No creo que haya algún viraje político o alguna negociación con los partidos, no veo que esto vaya a cambiar la relación con el Congreso”, destacó.
“Son simplemente cambios que hace el Presidente en uso estricto de su fuero presidencial, nombramientos en los que acertó”, dijo Eduardo Enríquez Maya, senador conservador.
“Estos son cambios propios del Presidente, no creo que él haya consultado a los sectores políticos para hacer estos cambios. Desconozco el tecnicismo de la ex- senadora Claudia Blum, ni tampoco se sabe a qué sector político representa”, dijo Carlos Ardila, representante del Partido Liberal.
El nuevo ministro de Defensa es una persona que piensa antes de hablar y no se deja llevar por las emociones. Por su trayectoria en la diplomacia –lleva más de 20 años de carrera–, sabe que una palabra incorrecta puede poner en riesgo las relaciones entre dos países, y por eso prefiere no pronunciarse hasta no tener información y así evitar una imprecisión.
Es el perfil que buscaban en la Casa de Nariño para la cartera de Defensa, que ha vivido varias crisis en estos 15 meses de gobierno.
Trujillo sabe cómo responder al Congreso y seguramente enfrentará las acusaciones con la diplomacia que lo ha caracterizado.
Su llegada a la cartera de Defensa significa también que no estará lo que resta del gobierno Duque. Para nadie es un secreto que el excanciller tiene aspiraciones presidenciales.