El presidente Santos aseguró este lunes el anuncio de Venezuela de derogar el decreto con el que conformó ‘zonas operativas de defensa integral marítima e insular’ (Zodimain) y que anexaba La Guajira colombiana a Venezuela.

Que además afecta aguas en disputa con Colombia es parte de un logro del diálogo diplomático que su gobierno emprendió para que se corrigiera esa situación adversa a los intereses nacionales.

Santos dijo a través de Twitter que “Venezuela anunció que modificará ese decreto (el 1787)”, lo que se constituye en “otra prueba de que la diplomacia y el diálogo funcionan”.

Este pronunciamiento lo realizó el Jefe de Estado con base en el discurso que su homólogo venezolano, Nicolás Maduro, pronunció este lunes ante la Asamblea de su país y en el cual, entre otras cosas, confirmó que este martes se publicará el decreto 1859 que modifica esas Zodimain.

“He decidido emitir el Decreto 1.859 que deroga el decreto anterior sobre la materia (…) Nuestras relaciones con Colombia se basan en el respeto. Le digo desde aquí al presidente Santos, debemos mantener las mejores relaciones de respeto al derecho internacional”, fueron las palabras del mandatario venezolano.

Si bien Maduro no especificó el contenido del nuevo decreto oficial, sí dejó en claro que el interés no es delimitar las zonas que están en disputa con otros países, como las aguas del golfo de Coquibacoa, sino determinar las áreas en las que eventualmente sus tropas podrían ejercer soberanía.

“Pido difundir el contenido de este decreto; es un decreto hermoso que ha surgido de todo este debate y lo hemos blindado por todas partes para que la oligarquía de Bogotá deje de mentir”, afirmó este lunes en la noche el mandatario venezolano ante la Asamblea de su país.

“Le decimos a Colombia: si la paz es posible ayudaremos a hacerla. Le tengo mucho amor y respeto a Colombia, jamás en la historia Colombia y Venezuela tendremos un conflicto armado. Eso está negado”, agregó.

De hecho, Maduro anunció una ley habilitante para conformar una comisión presidencial para abordar todos los asuntos relacionados con diferendos limítrofes que tienen pendientes el Gobierno de Caracas.

Esta diferencia diplomática entre Bogotá y Caracas generó una nota de protestas que la canciller María Ángela Holguín le envió al Palacio de Miraflores el 17 de junio, en la que rechaza los alcances del decreto 1787 que emitió Maduro e intenta contrarrestar la autorización de exploración petrolera que Guyana, otro vecino suyo con el que tiene un diferendo limítrofe, le otorgó a una multinacional estadounidense.

El anuncio de este lunes, de que se expedirá el decreto 1859 para derogar el anterior y que tanta controversia generó, llevó a Colombia a resaltar que esto demuestra que el diálogo diplomático genera más frutos que las controversias mediáticas.

Si bien el Gobierno colombiano está a la expectativa de conocer el contenido del nuevo documento, ya ve un avance.

“Tenemos que reactivar las comisiones negociadoras para lograr tener unas fronteras demarcadas con Venezuela, y ojalá este impasse nos sirva para eso”, le dijo Holguín anoche a EL TIEMPO. Y añadió: “En la diplomacia, el diálogo es el camino, no la confrontación”.

La intención de la Casa de Nariño es que por fin se puedan establecer los límites en las aguas del golfo de Coquibacoa, pero a través del diálogo y no por medio de decisiones unilaterales como las que tomó Maduro con el decreto que informó que se derogaba.

Bogotá, no obstante, espera conocer el contenido completo del nuevo decreto y, además, quiere potenciar los canales diplomáticos para mantener las buenas relaciones con un país vecino con el que comparte más de 2.200 kilómetros de frontera.