Muere en cautiverio candidato colombiano secuestrado por la guerrilla del ELN
Tulio Mosquera Asprilla, candidato a la alcaldía del municipio de Alto Baudó, en el departamento del Chocó y quien fue secuestrado por la guerrilla del ELN en agosto de 2019, murió ahogado, informó este viernes la Iglesia católica.
El arzobispo de Cali, monseñor Darío Monsalve, detalló en redes sociales que Mosquera murió ahogado cuando trataba de cruzar un río que estaba crecido. La guerrilla del Ejército de Liberación Nacional (ELN) le pidió a la Iglesia católica recibir la ubicación del cuerpo.
«Ahora el ELN pide le recibamos ubicación del cadáver de Tulio Mosquera Asprilla, secuestrado desde agosto 24 de 2019 y quien habría muerto ahogado en paso de un río crecido», detalló el alto prelado en Twitter en donde añadió que «la Iglesia del Chocó y la región clama por la vida y la libertad de personas en poder de grupos armados».
Monseñor Monsalve también dijo que desde la Conferencia Episcopal de Colombia le informaron a la esposa de Mosquera «esta dolorosa noticia».
«Informamos también del hecho a la Nunciatura, que pedía su liberación como gesto de voluntad para acuerdos humanitarios en el territorio, azotado por violencias», puntualizó el mitrado.
Mosquera fue secuestrado cuando hacía campaña como candidato del Partido Liberal a la Alcaldía de Alto Baudó.
Por su lado, el Alto Comisionado para la Paz, Juan Camilo Restrepo Gómez, rechazó la muerte de Mosquera y recordó que «se encontraba desde hace más de dos años privado de su libertad».
«Las cosas por su nombre: Llevaba más de dos años secuestrado por parte del ELN. Dicho grupo debe de cesar sus actividades criminales. Cesar el secuestro, la instalación de minas antipersonal, el reclutamiento de menores y que cese su actividad del narcotráfico», añadió Restrepo.
El ELN inició en febrero de 2017 unas negociaciones de paz con el anterior Gobierno colombiano que en mayo de 2018 fueron trasladadas a La Habana.
Sin embargo, el presidente de Colombia, Iván Duque, condicionó la continuación de los diálogos a que esa guerrilla deje en libertad a todas las personas que tiene secuestradas y renuncie a esa y otras actividades delictivas.
Los diálogos quedaron en punto muerto tras el atentado con coche bomba cometido por el ELN el pasado 17 de enero contra una Escuela de la Policía en Bogotá, que dejó 22 cadetes muertos y 66 heridos. EFE